Jesús Andrés Aranda
- En sueños quizá pudiésemos convertir el presente en pasado o viceversa.
-¿Será posible que en tal estado podamos comunicarnos con gente que ya no existen y andar por parajes desaparecidos a través del tiempo?.
-Es posible lograr todo eso y mucho más.He conocido personas que hasta despiertas lo han logrado.
-Acostumbras a hablar tan afirmativamente que uno termina creyendo todo lo que dices;deberías ser sacerdote o ministro.
Bueno, no hay que llegar a eso; pensé. A mi madre le ocurrían frecuentemente tales cosas.Y a mi aunque no tan frecuentemente como a ella. Mi amigo José siempre atendía mis opiniones y anécdotas con gran respeto.Aunque era sicólogo dudaba demasiado en los asuntos relacionados con los sueños y con la parasicología.Pero cuando le narré lo ocurrido la semana pasada tuvo que creerme.
-Bueno doctor, escúcheme ahora, por favor. Con esta experiencia reciente y otras muy verídicas acontecidas a mi madre, ya no hay lugar a dudas de que los sueños encierran grandes misterios.
Con este intróito iniciamos una interesante conversación que se extendió durante horas. Le ruego a mis lectores que visiten esta página el próximo 5 de enero. Les obsequiaré con el relato completo de lo que deseo comunicarles a través de este cuento, por coincidir con mi fecha de cumpleaños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario