jueves, 1 de enero de 2015

Posicion del Cooperativismo ante el Estado.

POSICION DEL COOPERATIVISMO ANTE EL ESTADO (QUINTA PARTE)
Jesús Andrés Aranda Valdés
Educador Cooperativista.
    Hemos establecido que el cooperativismo es un movimiento inclusivo donde se permite la participación de todas las personas sin importar sus credos o ideologías. El único requerimiento es que se acate los principios y valores universales que le rigen.
    Reconocemos que el orígen de nuestra doctrina está muy ligado a los fundamentos de la ideología socialista, que el cooperativismo es esencialmente socialista en sus principios y aspiraciones. Esto no significa que debe esgrimir una total identificación con determinada corriente o escuela del socialismo y mucho menos excusar o justificar errores durante la evolución de su aplicación, como en los casos de algunas estatizaciones innecesarias. Significa que apoyamos la primacía del trabajo sobre la del capital. Que el capital no debe acapararse por unos pocos sinó operar dentro de un sistema distributivo de beneficio para todos. Que una aspiración fundamental es transformar la economía para que sea la clase trabajadora el fundamento del progresivo ascenso de la misma a la posesión y administración de los bienes de producción dentro de un regimen claramente equitativo y participativo. Los ideólogos y la mayoría de los líderes cooperativistas intentamos que el concepto económico de la "plusvalía"denunciado por Carl Marx como un acaparamiento injusto de la ganancia de parte de los capitalistas se revierta a favor de los trabajadores del campo y la ciudad mediante medidas contributivas del parte del estado, creando empresas de control mixto y desarrollando nuestras cooperativas no solo en el el area de las finanzas. Es importante insertar pujantemente las cooperativas en todos los sectores de la economía.
Por otro lado, desde mediados del siglo diecinueve, el cooperativismo ha demostrado ser un modelo organizativo "sui géneris" con la capacidad de funcionar en países tanto desarrollados como en vías de desarrollo. Lo mismo podemos decir de su capacidad tanto colaborativa y adaptativa; como de contestación y  fiscalización ante disímiles sistemas;  sean estos socialistas, social demócratas o capitalistas.  Los peores modelos para el desarrollo de las cooperativas han sido los sistemas dictatoriales de extrema derecha controlados por las clases adineradas. Le siguen los gobiernos que durante periodos de apoyo excesivo a las estatizaciones han dejado estrechos márgenes a la participación de las cooperativas autónomas dentro del marco de la planificación gubernamental. Debo aclarar que no debemos confundir los conceptos de estatización y nacionalización, entre los cuales existe algunas diferencias a las cuales nos referiremos en una próxima ocasión.
    Entendamos además,  que  dentro del pensamiento cooperativista, al igual que ha ocurrido dentro de los grupos que han conducido las teorías económicas socialistas y del capitalismo, también han surgido diferencias en torno a nuestros acercamientos con el Estado.
    Sin embargo, en el cooperativismo debemos estar preparados, primero que nada, para a pesar de las diferencias enfrentar juntos las multiples gestiones de oposición del Estado al Cooperativismo. Estas son entre otras las siguientes: 1- Medidas agresivas contra nuestras cooperativas de parte de legisladores manipulados por adversarios de la cooperación, casi siempre identificados con el mundo corporativo.   2- El trato abusivo e injustificado de los gobernantes que al establecer sistemas contributivos tratan los beneficios de nuestras cooperativas  (ganancias, sobrantes o excedentes economizados ) de igual manera que al lucro de empresas capitalistas.   3- La prepotencia de agencias gubernamentales reguladoras que tratan de controlar las expansiones de cooperativas paralizandolas bajo el prisma de las leyes de monopolios.   4- Cuando el estado impone agentes públicos gubernamentales en las Juntas de Directores  de Corporaciones Públicas y Corporaciones de Capital Cooperativo controlando los procesos decisionales e imponiendo sus puntos de vista, aún cuando al hacerlo se infringen leyes y reglamentos vigentes.
    Aparte de eso,  algunos estados han asumido la posición más simple y burda de atentar contra el desarrollo del cooperativismo. Esto ocurre cuando ignora su existencia lo más que pueda, cuando desoye o engaveta soluciones, acuerdos y quejas presentados ante las agencias gubernamentales , o cuando ostensiblemente bloquea a los representantes del cooperativismo para que no puedan participar en posiciones claves como representantes de los procesos financieros, distributivos, agrícolas y de los consumidores en general. 
   No podemos ignorar que el estado a su vez, ha demostrado una actitud favorable a la cooperación en ciertos países. Así ha ocurrido en los últimos tiempos, cuando crea Consejos Cooperativos Permanentes a través de legislación, cuando cita con anticipación razonable a representantes de las cooperativas a vistas públicas, cuando acepta recomendaciones del movimiento cooperativista para nombrar funcionarios de gobierno, cuando aporta fondos y asistencia técnica para el desarrollo de nuevas cooperativas, y cuando mantiene relaciones permanentes relacionadas con la planificación y desarrollo del cooperativismo y de la economía en general ,
    Veamos ahora como define nuestro máximo organismo representativo a nivel internacional- la Alianza Cooperativa Internacional- cual debe ser la actitud del cooperativismo ante el /Estado:
   - " El Comité Central de la ACI ...reconoce que hay una identidad de fines entre la acción cooperativa y la acción del Estado, siempre que éste esté libre de la presión de los intereses privados y responda a la necesidad de una organización que haga prevalecer la economía de servicio sobre la economía de lucro, tanto en el plano nacional como en el internacional.
    El movimiento cooperativo reconoce por tanto que los Estados están obligados a tomar medidas para asegurar la dirección de la economía.
    Reconociendo esto, no hay oposición, sino un reparto razonable de las tareas y colaboración mutua en las actividades del Estado y las organizaciones cooperativas que deben ser asociadas a dichas actividades.
    Por estos motivos el movimiento cooperativo tiene derecho a reclamar de los poderes públicos la libertad de su pleno desenvolvimiento en los amplios campos de la vida económica en los que la cooperación consigue conciliar el orden, la eficacia y la libertad por disciplinas libremente aceptadas y practicando el "self help" y la "ayuda mutua"
    Resumiendo esto podemos concluir que el cooperativismo reconoce pleno derecho al estado para desarrollar una economía pública y que a su vez  tiene unas responsabilidades muy serias en la preservación de su autonomía y su capacidad de influir integralmente en los programas de desarrollo del Estado.
(Continuará)   

2 comentarios:

  1. Ni idea a quien correspondía la foto suya que aparece en las imágenes que Google publica bajo mi nombre. Primera grata sorpresa del 2015. Conocerle.

    ResponderEliminar
  2. Muy grato su mensaje. Correspondo de igual manera. Le invite cordialmente a visitar siempre que desee mi blog y mi muro de F.B. y si desee que nos envía sus opinions o colaboraciones. Mi F.B. es un foro de pensamiento libre que acepta opiniones diversas...


    ResponderEliminar